Mejores juegos open source

Mencioné en una anotación anterior que en Linuxjuegos se estaba realizando una encuesta para escoger los mejores juegos libres del 2006. El período de votación ha concluido y no me animé a participar porque no he probado muchos de los juegos listados. Sin embargo no quisiera dejar pasar el inicio de año sin hacer aunque sea una mínima mención de los títulos que no deberías perderte si quieres jugar algo libre, ya sea en Linux, Windows e incluso Mac.
En primer lugar Battle for Wesnoth. Sí, debo reconocer que no lo he terminado, pero sí lo he comenzado varias veces. Wesnoth es un juego maduro, estable, con contenido y para rematar, no necesita tarjeta gráfica 3D ni nada de eso. Se echa de menos un modo de juego skirmish pero eso es un mal menor.
Scourge es otro proyecto que apunta a convertirse en insignia del género RPG. Aún le faltan detalles, no tiene modelos propios, pero es de esperar que eso se solucione.
Si buscas acción pura, entonces Nexuiz o Alien Arena son tus opciones. Me agrada más el segundo.
En el apartado de estrategia no vamos muy bien. Salvo Freeciv, un título veterano en estas lides, no hay muchas cosas que valga la pena mencionar. Desde que Freecraft fue cerrado por capricho de Blizzard han pululado proyectos basados en el motor Stratagus, pero nada que salte a la vista e invite a jugar. Battle of Survival se da un aire a Command and Conquer, pero carece de una buena campaña y en general no da para más de unos minutos de prueba. Los clones de Total Anihilation son un caso aparte y más vale no meterse en eso. Glest ya es algo más decente, aunque jugarlo en Linux es engorroso.
El género online no va mal. Tenemos Eternal Lands y Planeshift. El primero es un proyecto establecido, con una sólida comunidad y un equipo lidereado por un reconocido desarrollador. El segundo marcha lento, pero aplastante. Es un juego con sus propias ideas y conceptos innovadores, luchando contra una perenne escasez de mano de obra. Mi felicitación al equipo detrás de Planeshift, sin duda alguna cuando sea grande quiero ser como ustedes.
Seguro estoy que se me quedan muchas cosas en el tintero (mejor dicho, en el teclado), así que se aceptan sugerencias.